La protección de los datos empresariales se ha convertido en una prioridad absoluta en el entorno digital actual. Las amenazas se diversifican y sofistican a la par que avanza la tecnología; esto exige que las empresas implementen estrategias robustas y avanzadas para garantizar la confidencialidad, integridad y disponibilidad de su información más valiosa. Desde la gestión de accesos y la ciberseguridad perimetral, hasta el cumplimiento normativo y las respuestas automatizadas ante incidentes, todo suma en la construcción de un ecosistema empresarial más seguro y resiliente. Abordar la protección de los datos requiere una visión integral que involucra tanto a la infraestructura tecnológica como a los colaboradores, fomentando una cultura constante de aprendizaje y actualización frente a las nuevas amenazas.